El aumento de los costes energéticos, de transporte, la escasez de materias primas o el Covid-19 están cambiando el paradigma del comercio internacional… y cada vez más compañías apuestan por la producción europea y el valor seguro del “made in Europe”. Marcas como Tiguar apuestan por priorizar el desarrollo de sus productos en Europa (Polonia concretamente), teniendo así en consideración la localidad o proximidad territorial: desarrollar y fabricar en Europa tiene un impacto directo en la cadena de valor. Una cadena de suministros más corta es sinónimo de mayor flexibilidad ante aumentos de demanda inesperados, mayor facilidad para la gestión de incidencias, e impacta directamente en la sostenibilidad ambiental, pues se contamina mucho menos en transporte y embalaje.
En definitiva, la producción en Europa es menos riesgosa, y además se garantiza el cumplimiento de los estándares de calidad europeos.
Tiguar, además, apuesta por la formación y es la organizadora del mayor evento de fitness en Polonia y uno de los más grandes a nivel europeo, la convención EU4YA.